martes, 30 de junio de 2009

=== AVISO: CIERRO POR VACACIONES ===

Amigos:

Pues eso, que este Blog permanecerá cerrado por vacaciones del 3 al 15 de Julio.
Aunque puede ser que el mismo día 15 me pase a contar como me ha ido con la prueba de esfuerzo que me haré ese mismo día a las 10:00 de la mañana.

Playa... mar... descanso... relaxxxxxxxxxxxxx... siestasssss... birraaaaaaas... más playa... sardinitas al espeto... más... más... más...

¡¡¡Aaaaaahhhh!!! ¡¡¡Qué de planes tengo!!! No sé si me dará tiempo de hacerlos todos.
Un par de días tengo para aparecer por aquí alguna vez.

Hasta la vuelta (por adelantado y por si acaso no pudiera despedirme).

¿Carril - bici? ¿Esto?

Mucho se ha venido hablando en las últimas semanas a cerca del estado y evolución de los carriles-bici existentes en Madrid y de los supuestos 60 kilómetros que piensan completarse este año.

Esto que veis es el presunto carril-bici que actualmente se está construyendo a lo largo de la calle Hermanos García Noblejas en uno y otro lado de la calle. Construido a partir de restar espacio peatonal en lugar del destinado a los vehículos. Me limité a fotografiarlo, pero me quedé con las ganas de medirlo. Apenas debe tener algo más de un metro de encho. ¿¿¿???
Similar a este es el que hay en la calle O'Donell. Personalmente no me convence mucho, pero quisiera leer opiniones.

Aquí se cruzan dos ciclistas en sentido opuesto y la cosa puede no estar muy clara para ninguno de los dos. Y para más inri, con el consiguiente riesgo para los peatones que pudieran estar cerca o cruzarse en cualquier momento.

Juguete roto

Era la del juego, otra de nuestras muchas rutinas. En los perros, tan importante como en los humanos. A través del juego se desarrollan muchas habilidades y se esquiva la marcialidad de aquello que por cotidiano se hace anodino.


Salíamos a la calle, íbamos al decampado arcano a casa y, una vez la soltaba, Noa salía disparada hasta el matorral donde escondíamos todos los días la rama con la que jugábamos. De primeras, yo la impedía cogerla. La decía: “¡No!” – se paraba en seco y no la tocaba -. “A hacer tus cosas primero.” Entonces ella en dos o tres minutos, hacía sus necesidades. Ya desahogada, venía a mí contenta y me miraba como diciendo: “¿Jugamos ahora?”


“¡Muy bien!” – la decía yo estimulándola con un par de caricias. “¡Vamos! ¡Tráeme el juguete!”


Ella volvía al matorral como alma que lleva el diablo, cogía la rama y me la traía. Era siempre la misma rama. Nuestra rama. De unos cuarenta centímetros de largo y unos cuatro o cinco de grosor.


Cuando llegaba a mi altura, o la soltaba a mis pies o dejaba que se la cogiera de la boca sin poner resistencia. Después sería distinto. Daba unos pasos atrás y se ponía alerta, muy tensa, con las orejas en punta, dando saltitos cortos sobre las patas traseras. Haciendo el caballito. Sabiendo que se la podía lanzar en cualquier momento y en cualquier dirección.


No importaba lo lejos o lo fuerte que se la lanzara. Sin perderla de vista, salía rauda a buscarla. Como las balas. Por muy oculta que quedara entre los arbustos, siempre se las arreglaba para encontrarla. A veces me sorprendía acercándome al lugar donde había caído pensando, inocente de mí, que tendría que ayudarla. Pero siempre la encontraba. Incluso de noche. Su olfato era más fino que mi vista.


Luego de lanzarla varias veces, venía la sesión de regates. Entonces venían las carreras arriba y abajo. Literalmente me toreaba con habilidad exquisita. Pasaba a mi costado como una centella burlando todos mis intentos por capturarla. Las veces que conseguía hacerlo eran porque ella quería que así fuera. Y ahí venían los forcejeos para quitarle la rama de entre los dientes. Otro juego dentro del mismo juego. Carreras y requiebros.


Así nos pasábamos durante unos veinte minutos. Así terminaba de sedienta ella cuando llegábamos a casa. Sobre todo si hacía calor.


Esa rama era nuestro juguete. Yo decía la palabra juguete, y ella ya sabía lo que venía después y lo que tenía que hacer. Terminábamos de jugar y yo la volvía a colocar en el mismo arbusto. Cada día. Todos los días.


El caso es que hace unos pocos días tuve la necesidad – la extraña necesidad -, de pisar ese descampado. Desde hace casi dos meses, desde el día en que Noa dejó de estar con nosotros, yo no había vuelto a pisarlo. Evito en lo que puedo hasta mirarlo cuando paso delante de él cada día. No me veo capaz de mirarlo sin imaginara a Noa correteando por él como ella lo hacía.


Y es harto difícil, porque está muy próximo a casa, en la acera de enfrente, y por fuerza al volver del trabajo, tengo que pasar por delante todos los días. Pero agacho la cabeza si voy andando o procuro mirar al frente si voy en coche.


Fui al descampado. O ya no es el mismo, o mis ojos ya no lo ven igual. Me costó poner los dos pies en él. Lo miraba desde la acera pero no terminaba de entrar en él. Lo que antes era un fresco vergel cuando ella me acompañaba, ahora es un árido desierto de hierba seca por todas partes. Anduve unos pasos… pero me pareció llevar plomos en los pies. Tampoco fue mucho lo que anduve. No podía.


Y entonces, tras coger aire, hice lo más difícil. Dirigí mis pasos al arbusto del que he hablado antes. A un metro escaso de él, se me hizo un nudo en la garganta. Se me saltaron las lágrimas. Tuve que clavar las rodillas en el suelo… La rama, nuestra rama, seguía allí. En el mismo sitio de siempre. Donde la dejamos Noa y yo el último día que jugamos. La víspera de su partida.


Si nada en ese descampado es ya igual que antes, la rama tampoco. Ahora me parece una rama seca y más inerte que nunca. Una rama que en la boca de Noa parecía cobrar vida propia, ahora la veo y creo que carece por completo de ella. Al principio no me atreví a tocarla, me limitaba a mirarla como se mira un objeto de culto. Después de unos minutos conseguí acariciarla ligeramente con la yema de los dedos, mientras repasaba recuerdos.


Y no, la rama ya no es la misma tampoco. Seca, áspera entre mis dedos… No es la misma rama. Esa rama también ha perdido su vida. La tome entre mis manos unos segundos, y me bastaron para darme cuenta de ello. No tardé en volver a dejarla en su lugar. Y allí se quedó. Tuve el aplomo de hacerle una foto con mi teléfono móvil y unos minutos después me fui de allí.


Volví para casa con pasos plomizos. Sin mirar para atrás. Noté más que nunca que me faltaba algo a mi costado acompañando mis pasos. Se me había olvidado lo que era regresar a casa desde ese descampado en soledad.


No… la esencia de esa rama ya no es la misma. Se ha diluido en el aire.
Ahora es… un juguete roto.


¡Cómo pueden cambiar las cosas!

viernes, 26 de junio de 2009

Me he quedado sin un ídolo

No sé cómo sonará pero me da igual.
Lo digo como lo siento. Hoy me he quedado sin un ídolo.

Sería lo que fuera y haría lo que fuera,
pero para mí, Michael Jackson era un fuera de serie.
Como muchas veces se ha dicho, no era de este planeta.

Energía, vitalidad, búsqueda de la perfección
en todo lo que hacía... ritmo, explosión musical...
Hacía imposible mantener los pies quietos oyendo
su música. Y si era viéndole bailar... ¿qué voy
a decir de eso que no se haya dicho ya?

Todo eso y más era Michael Jackson. Al menos para mí.

¿Errores en su vida? Sí, los tuvo. ¿Y quién no los tiene?
Todos los tenemos? ¿Excéntrico? Sí, puede, pero era
un excéntrico de los que no hacen daño, de los que sueñan
con ser Peter Pan, de los que su mayor sueño era saber
alcanzar al niño que todos llevamos dentro.
Y lo conseguía con su música de fantasía rítmica.

Me gustará siempre su música. Es imprescindible para mí.
En casa, en el coche, en el trabajo... haciendo cualquier
faena en casa... ¡En todas partes!

En el coche siempre he llevado y seguiré llevando
el disco de Thriller. Siempre.

Ayer, después de casi veinte días, recogí el coche del
taller. En el radio-cd llevaba puesto este disco.
Lo llevo permanentemente. Y esta mañana lo he ido
oyendo de camino al trabajo. Como siempre. Tarareando
sus canciones.

No sabía nada de su fallecimiento. Si hubiera puesto
la radio hubiera sido otra cosa de Michael Jackson lo
que hubiera oido. Me alegro de que no haya sido así.
Al llegar al trabajo ha sido cuando me he enterado
por los compañeros. Ha sido un mazazo.

Mi lista de ídolos desaparecidos aumenta en una unidad.
"Me quedé" sin Elvis Presley - ¡aquella voz!, luego sin
Fredy Mercury - ¡otro pedazo de voz! -, y ahora...
ahora, Michael Jackson. Mí idolo de juventud y de casi toda
mi vida.

Descanse en Paz en el Cielo o en La Tierra de Nunca Jamás,
de la que ya tenía un pedazo en su jardín de Never Land.

Gracias, Michael Jackson.
Llenaste de ritmo una gran cantidad de huecos de mi vida
que si antes eran inolvidables, ahora son imborrables.



Se le podrá criticar por muchas cosas, pero nadie es lo suficientemente santo, ni lo suficientemente demonio.


Fotografías tomadas del Blog Michael Jackson "Irrompible".

miércoles, 24 de junio de 2009

Tomando referencias

Aún sabiendo que estas referencias no son del todo válidas, no dejo de tomarlas como un punto de partida.

Para empezar, por fin he conseguido ver la cifra de 140 de pulso medio en una sesión de 30 minutos. Me hacía ilusión verla.

Mi primera experiencia el Lunes en mi nueva fase de entrenamiento, muy positiva. No es tan aburrido como presumía. Es cuestión de mentalizarse nada más. Asumir que lo que hay es lo que hay y punto. Es un entrenamiento muy peculiar. No se fuerza nada y yo no dejo de divertirme que es de lo que se trata. Trato de verlo así. Yo creo que de esta forma uno no debe ni de lesionarse.

¡Ya irá habiendo más! ¡Palante, siempre hacia delante!

2 min. de carrera + 4 caminando x 5 veces = 30 minutos.

Hoy Miércoles, a por la segunda sesión.

Lo mejor de un buen libro

Lo mejor de un buen libro, a veces se ve nada más abrirlo.
En el caso del mío, el que presenté el otro día - Correr - Amby Burfoot - Desnivel Ediciones -...
... en el caso del mío, es así. Nada más abrirlo te encuentras esto:

Dedicatoria personal de Emilio Comunero, alias El Señor de las Arenas.
Corredor empedernido y corajudo de mil y una carreras de ultrafondo por las arenas de cualquier desierto que se tercie. El Maratón se le quedó pequeño.
Ahí está su dedicatoria. Con su sello inconfundible. Emilio, un grande del atletismo popular.

¡ Emilio, un fuerte abrazo, compañero !

lunes, 22 de junio de 2009

Silencio, se... reedifica


Plan Cimientos.
1ª semana de 10.
Plan: Correr a paso muy suave 2 minutos, andar 4 minutos, todo ello 5 veces.
Total: 30 minutos.
Días: Lunes, Miércoles, Viernes y Domingo.
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Comienzo la parte principal de este plan con el que busco una base sobre la que construir a un futuro corredor de fondo.
Completados los ocho días de andar 20 y 30 minutos, nada más que andar y a paso vigoroso, me dispongo a hacer esta primera de 10 semanas. Aún no he comenzado y ya estoy deseando disfrutar de los resultados.
Más ligero y asequible no puede ser. No puedo tener excusas para no llevarlo a cabo.

Todo esto vino por un par de salidas que hice días atrás, intentando ver si era capaz de correr a 145 pulsaciones. Lo más que conseguí fue una media de 150 y al precio de irme a los 8 minutos por kilómetro. Eso no me gustó nada. Me dio una idea de lo falto que estoy de muchas cosas.
Espero que esto que voy a hacer durante los próximos dos meses y medio sí que me sirva para algo.

sábado, 20 de junio de 2009

Disculpas a las visitas

Visitante, te pido disculpas por no atenderte en días anteriores como mandan los cánones.
No he dispuesto del tiempo necesario para ocuparme del Blog ni de responderte.

La semana que viene me pondré al día en todo ello.
Gracias por tu paciencia y por mantener tu interés.

Un fuerte abrazo.

Reciclaje - 3 -

Para ser sincero, en todos estos años que han pasado, jamás lo leí completamente. Lo consultaba mucho, pero a salto de mata o buscando temas concretos que me interesaran. Y un libro no debe leerse así. Un libro se debe leer desde la primera hasta la última página. Nada más abrirlo, me di cuenta de lo cierto que es esto. Paso las primeras páginas y me encuentro con el primer capítulo que se titula: Comenzando a correr. Se divide en varios apartados. Habla de El primero de muchos kilómetros. Y el primero de los cuatro puntos en que este se divide, me saltó a la vista como con luz propia. Se titula Caminar antes que correr. Sé positivamente que nunca lo leí porque nunca lo consideré necesario. Siempre lo pasé por alto. Andar es el primer paso para trabajar el área aeróbica del ejercicio. Lo ignoré porque nunca creí que hiciera falta empezar desde tan abajo. Terrible error el mío.

Me bastó leerlo para una vez leído, cambiar un plan por otro. Pensé: “Si ya iba a empezar desde abajo para crear una base, ¿por qué no empezamos desde más abajo para construir los cimientos? Tiempo tengo para ello de sobra y no tengo prisa.

Y en ello estoy…
El Plan Cimientos – a todos mis planes los bautizo -, ha comenzado.
Sigo el que propone el libro, que empieza por 8 días seguidos andando a paso vigoroso 20 minutos los primeros 4 días, y 30 minutos los otros cuatro, que ya estoy a punto de terminar. La primera semana del plan – todas son de cuatro sesiones semanales -, comienza el Lunes 22 con – no se rían -, 2 minutos corriendo y 4 andando. Esto, por cinco veces. Total, treinta minutos. La carrera debe ser completamente aeróbica.

La segunda semana, será de 3 min. corriendo y 3 andando, por 5 veces. Otros 30 min.
Todo en días alternos. Lunes, Miércoles, Viernes y Domingos.

Para hacer esto necesitaré disciplina y paciencia. Creo que ni una ni otra me faltan. He pasado por peores cosas que esta de empezar desde los cimientos, y las he superado.
El fruto de todo esto, lo veré al final de 12 semanas. Y esto será para la primera semana de Septiembre. Ese es mi plan de entreno para el Verano.

A parte de todo esto, hago bastante bici. El Miércoles, me hice un Faunia en bici. En total unos 15 Klm con el recorrido extra.

Semanalmente iré poniendo por aquí lo que toque y cómo lo llevo.

Y como último complemento y no menos importante, para sacar un mayor provecho a futuros entrenos, el día 15 de Julio, me haré una PRUEBA DE ESFUERZO en el Centro de Medicina Deportiva Oberón.

** El libro del que he hablado es Correr – Desnivel Ediciones – Amby Burfoot.
Emilio, Señor de las Arenas, ahora como entonces, gracias por este libro.

Reciclaje - 2 -


En ello estaba cuando la tercera voz me susurró al oído que si para alcanzar un óptimo rendimiento tenía que ponerme a andar, pues que anduviera. Es necesario construir una base. Yo creía que ya había empezado a construirla o que ya “tenía algo” en mis piernas, pero no era así. Ni tenía fuelle, ni fondo ni nada de nada. La ilusión y el hambre de kilómetros me estaban engañando. Pero yo no sabía verlo. Con esto, abundo en lo que comentaba hace unas semanas. Decía que por suerte cuento con amigos que me hacen ver lo que yo no era capaz de ver.

Después de mucho meditar, y con la ayuda de unos turnos de trabajo que no me dejaban tener el tiempo suficiente para llevar un entrenamiento rutinario, paré el carro durante casi tres semanas en las que sólo salí a rodar un par de veces. Ninguna de ellas muy motivado que digamos. El descanso, mitad forzoso, mitad voluntario para planificar con calma, me ha venido muy bien.

Yo no hacía más que darle vueltas a esas palabras: “Si tienes que andar, pues andas”. Así, estando en casa, decidí coger de una estantería un libro que aprecio mucho. Un libro que hace unos años me regaló alguien muy especial. Me lo regaló Emilio Comunero. No hace falta que le presente. Todos sabemos quién es y lo que es. Un magnífico compañero del Gran Grupo Moratalaz, y mejor persona. Me lo regaló cuando estuve ingresado en el Hospital por culpa de un trombo que se me alojó en un pulmón a raíz de una intervención de tendones en el pie izquierdo. Me visitó y me regaló este libro.

Reciclaje - 1 -

Cuando uno lleva un blog prácticamente día a día, como ha sido en mi caso en los últimos dos meses, y quieres volver a él después de un periodo de inactividad, la verdad es que se hace difícil. ¡No sabes por donde empezar! ¡No sabes por donde cogerlo! Y no será que no tengo cosas para contar o de las que hablar.

Ha habido días en que pensaba incluso en cuál iba a ser el título del post que iba a poner ese día, y que por unas cosas u otras acababa no escribiendo. “Silencio. Se rueda”, “Cerrado por derribo”, “Cerrado por reconstrucción”, “Borrón y cuenta nueva”. Estos son algunos de los títulos que pensaba usar.

Simplemente al leerlos, puede uno hacerse una idea de qué pasos he dado últimamente y el proceso de reciclaje en el que me he metido. Y además de lleno.
De esto se trata. De reciclar para aprovechar lo que había y de reutilizar lo que ya tengo más lo que pueda haber para hacer con este cuerpo que Dios me ha dado las cosas que pretendo hacer. Una de ellas, correr el MAPOMA 2010.

Voces bien documentadas me han dicho repetidas veces en las últimas semanas que no estoy haciendo bien las cosas. Esto ha sido así por tres veces. Y he decidido que algo hay que hacer para que las cosas vayan lo mejor posible. Había que enderezar el rumbo y cuanto antes. ¿Forma de hacerlo? Dar un paso para atrás. Había iniciado un plan basado en el incremento del 10 % semanal en mis entrenamientos semanales.

viernes, 12 de junio de 2009

Jueves de Celebración

Jueves 11 de junio de 2009
Primera Comunión de Miriam











lunes, 1 de junio de 2009

Carrera AVT en Moratalaz 31-05-2009

Una mañana la de ayer Domingo en Madrid, soleada, brillante, luminosa y tal vez algo calurosa desde primera hora.

La víspera me quedé sin poder hacer el Anillo Verde Ciclista por incompatibilidad con las horas de sueño. Salía de trabajar a las 06:30 de la mañana y tuve la tentación de hacerlo hasta el último momento. Finalmente decidí que no era nada recomendable hacerlo.

Me di una última oportunidad acostándome para dormir un par de horas, pero el cuerpo no quiso. Se quedó pegado a las sábanas hasta las 3 de la tarde. Estaba claro que no era el mejor día para hacer esto. Habrá que esperar a otro fin de semana más propicio.Sin embargo, ver al menos en parte la carrera que se desarrollaba en mi barrio hoy, la AVT, era algo obligado. Hice algo más que un esfuerzo por estar si no en la salida, sí en el paso por los kilómetros 1 y 4 que estaban en Fuente Carrantona y pegados a mi casa.

Ya el día antes le dije a mi hija Miriam - la pequeña -, que si quería acompañarme. La respuesta ya la sabía yo. Se levantó a las 9 preguntando que si nos ibamos ya. Desayunamos y salimos. Estuvimos haciendo fotos los dos. Mañana vere cómo salieron las suyas. Están hechas con una réflex y habrá que esperar a revelar el carrete.

Especial seguimiento a los miembros del GGM que corrían en la prueba. Raquel, Mario, Claudio, Iván, y Nacho. (Espero no equivocarme).

Algunas refernecias del GGM... Impala: 36:00, Claudio y Stinfisk entraron juntos con 39:48, Mario: 44:38. Raquel no sé qué tiempo hizo pero después de pasarlo tan mal como lo pasó, y aguantándose las ganas de retirarse, logró trofeo como 3ª clasificada de veteranas A.
¡Buen equipo este GGM! ¡Siempre dando la talla!