domingo, 6 de junio de 2010

Cuatro buenos momentos de la semana... ¡y... cómo no!

El Martes - de esto no puedo ofrecer documento gráfico -, recibí en mi trabajo una visita largo tiempo esperada. El buen amigo Quique se acercó a verme. ¡Ya me conoces con otra ropa de faena, jejeje...!
Charlamos unos minutos de proyectos y de futuro. Fue el momento dulce de la mañana. ¡Gracias, Quique! Un placer verte esa mañana como lo es verte siempre.

El Miércoles, tras el turno de trabajo, asistí a una exhibición de guitarra en el colegio de mi hija. Tres compañeras y ella mostraron algo de lo aprendido en este año en esta actividad extraescolar. En el caso de Miriam, es su primer año de guitarra. Hace auténticas virguerías y se me cae la baba cuando la oigo tocar.
Ahí está con su medalla al esfuerzo más que bien ganada.


Ya tiene más medallas que su padre.




El Jueves, tras la visita a mi madre en Pozuelo de Alarcón, y la trotada por el Parque Fuente de la Salud...


... a última hora de la tade, mi mujer y yo, dimos un largo y tranquilo paseo por los alrededores de casa.
Preocupante el estado del suelo del pasillo paralelo a la recta de 800 m. de Valdebernardo...



El colofón de este paseo fue tener la suerte de capturar esta bonita puesta de sol desde el Parque de Moratalaz - porción de la Cuña Verde que pasa por mi barrio-.


Y jugar un poco con la función "panorámica" que ofrece mi teléfono. Tres fotos consecutivas en una sola para conseguir este efecto...


El Viernes, que tocaba descanso, me acerqué con la bici al Pinar de Santa Eugenia.
Trataba de encontrar el paso para llegar allí a pata desde mi casa. Ahora que lo he encontrado, es ruta garantizada.



 
De camino...


El paso por aquí no es apto para alérgicos, pero
el olor que desprenden estos arbustos casi consigue que 
te detengas a disfrutarlo.



Por cierto, y esto lo destaco, no recomiendo el paso por el Parque de Valdebernardo a horas peligrosas solarmente hablando a menos que lleves una buena reserva de agua. Es un pu...ñetero desierto en el que lo más que encuentras es una sola fuente... ¡que no funciona! Atravesarlo a pata tiene que ser mortal. Hasta los jardineros que había allí replantando me lo dijeron. Llevaban garrafas de cinco litros en la furgoneta y me ofrecieron unos tragos. A mi se me había terminado el botellín de la bici.
Altamente peligroso atravesar este parque. Más que un campo de minas. ¡Ni un gramo de sombra y el suelo escupiendo fuego!

Y para hoy... para hoy Domingo, concierto. Voy a llevar a mi peque a Rock in Río a que vea a su ídolo - no sé si decir popero o rockero -, pero en cualquier caso su ídolo que no es otra que Hanna Montana. Es su sueño. Y demasiado bien sé yo lo que es cumplir un sueño como para no permitir que ella cumpla uno de los suyos.



Hace meses compramos las entradas y hasta ayer la tuvimos guardada la sorpresa. Salí de trabajar a las 6:30 y en vez de irme a hacer la sesión me acerqué al lugar para tenerlo perfectamente localizado y que hoy no hubiera pérdidas de tiempo para llegar allí. Se le localiza en Arganda del Rey, pero está más en Perales que en Arganda, aviso.

De vuelta a casa, me tuve que parar en una cuneta para admitir... ¡qué bonito está el campo!


Mires donde mires encuentras belleza...








¡Pero cómo no! Toda semana tiene que tener su garbanzo negro. Y esta semana no podía ser menos.
Ayer hubimos de cumplir el trance de visitar el Tanatorio de la M-30. ¿Cuántas veces ya en lo que va de año? Ni lo sé ni llevo la cuenta ya, pero demasiadas.

Ayer, la maldita enfermedad se llevó al Jefe de mi mujer. Tuvo que luchar con la enfermedad largo y penoso tiempo. Era esperado pero no por ello menos doloroso. Doloroso a la vez que injusto; 55 años, en la plenitud de la vida...
Esto ha afectado a mi hija lo que no está escrito. Ayer al enterarse le lloró desconsolada como si de un familiar se tratara. Le conocía y le quería mucho. Algunas veces iba a buscar a mi mujer al trabajo y llevaba a Miriam conmigo. La sentaba en sus rodillas y siempre tenía algo para ella, unos caramelos, un juguete, algún bolígrafo, alguna sorpresa... y charlaba con ella sobre el colegio...
Un buen hombre, muy humano. El tipo de jefe que se rige por el respeto y no por "el miedo al jefe". De los que todos quisieramos tener. Descanse en paz.

Hoy... toca entierro y después, al concierto. Duro contraste. Así se dan las cosas en la vida algunas veces. Todo son contrastes. Los contrastes de la vida.

PD: Mucha suerte a todos en vuestras carreras de hoy.

8 comentarios:

  1. Genial la entrada, Pepe, muy humana y sentida, muy propia de tí; sigue disfrutando de tu gente, un abrazo.

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  2. Buena semana y con buenos momentos, aunque quede un poco transtocada por el fallecimiento de una persona querida. Seguimos pa`lante Jose.

    Un abrazo.

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  3. Excelente Entrada Pepe, la foto con las manos de tu madre es increible, hay mucha ternura en ella.

    Fue un placer verte en acción en JC8.

    Espero que te lo pases en grande en Rock in rio, yo estuve hace 2 años y es una pasada....

    Descanse en paz el jefe de tu mujer, es una lastima perder gente buena.

    Un saludo
    Quique

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  4. Qué linda crónica Pepe! siempre consigues emocionarme y arrancarme una sonrisa! espero de corazón que disfrutéis mucho tanto Miriam como tú en el concierto, en el cole todas las niñas llevan cosas de Hanah Montana: estuches, bolis, camisetas, mochilas, hasta zapatillas!
    Siento el fallecimiento que comentas, espero que tu mujer y tu peque se encuentren mejor
    Un beso enorme

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  5. ya hablamos ayer, pepe. Espero que te lo hayas pasado muy bien viendo a miriam boquiabierta en el concierto.

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  6. Bueno, Jan, boquiabierta sí, pero con lágrimas en los ojos también. Por distintos motivos. Unos alegres y otros no tanto. Esto es así.

    En mi horario ha habido cambios de última hora. Ya no salgo ningún día a las 6:30. No hago noches hasta el fin de semana. Cualquier cosa ya te avisaría. Lo vamos viendo porque aquí todo puede volver a cambiar de un día para otro.

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  7. Seguimos pa'lante, Miguel. Siempre.

    En general, Quique, puedo decir que el contenido del concierto estuvo bien, y el ambiente y el montaje de aquel lugar también. Tuvo cosillas muy puntuales que no me gustaron tanto, pero la chiquilla se lo pasó en grande que era de lo que se trataba. Menos al final, pero eso lo cuento luego.

    Celina, tan generosa como siempre. ¡Ganas tengo de verte! A ver si algún año...

    Besos y gracias por las palabras solidarias de todos.

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